NEUQUÉN (ED) – La senadora nacional Lucila Crexell volvió a marcar distancias con el gobierno del MPN al asegurar que “no hay diálogo” con el gobernador Omar Gutiérrez y relativizó si “alguna vez lo hubo”.
Con los desafíos de Vaca Muerta en el bolsillo del próximo año legislativo, Crexell deberá integrarse a una oposición, en un contexto donde el partido provincial perdió representación y donde las alianzas condicionarán la real defensa de los intereses neuquinos.
Días atrás, el acuerdo del interbloque de Vaca Muerta, que suscribieron Gutiérrez y Weretilneck para coincidir en el Senado, pareció adelantarse a los hechos en la construcción de un consenso que potencie a las provincias.
En diálogo con LU5, Crexell no ocultó su distanciamiento con Gutiérrez y aseguró que “tengo muy claro cual es el rol del senador, cual es la jerarquía del senador, como representa la provincia ante el gobierno federal” y aclaró que “el problema es que no quiere reconocer el rol que tenemos los senadores”, sostuvo.
Sobre la relación con el ex gobernador Jorge Sapag, admitió que fue un año de mucho diálogo y está recompuesta la relación. En tanto, aclaró que “el afecto es lo rige en la familia, tratamos de preservar esto, más alla de que tenemos diferencia en algunos temas”.
Tras la noticia de la Corte, la senadora señaló que “fue una batalla muy dura, muy difícil y ahora habrá que ver qué queda de todo esto” y cuestionó la falta de códigos por las presentaciones que se sucedieron una vez realizadas las elecciones.
Finalmente, Crexell se refirió a la situación de Chile y advirtió que el Congreso de la Nación estudia una declaración por la situación difícil que afecta a toda Latinoamérica.
