BUENOS AIRES (NA) — El porteño Diego Schwartzman, 14 del ránking mundial y primer preclasificado, logró ayer unos de los triunfos más épicos de la historia del ATP de Buenos Aires, al ganar en una pierna por una lesión muscular al uruguayo Pablo Cuevas (48) en una maratón de tres sets, en el Buenos Aires Lawn Tennis.
“Peque” Schwartzman sufrió un tirón muscular cuando el marcador estaba 5-7, 7-6 (11) y 5-4, con match point a su favor, y aguantó hasta el final como pudo, con un visible dolor que no lo dejaba desplazarse con comodidad.
Pero ante un repleto estadio “Guillermo Vilas”, en el court central del Buenos Aires Lawn Tennis de Palermo, Schwartzman, que en el segundo parcial había dado una muestra de carácter para remontar cuatro match points, se aprovechó de la desconcentración de Cuevas, que con una doble falta le entregó por 7-5 el último set y una batalla de casi tres horas y media.
“Gracias por quedarse, es difícil hablar. No puedo hablar, estoy con la alegría del partido, pero quiero ir a hacerme un estudio. No soy de actuar, no me gusta terminar así el partido, lo hice por Pablo, soy sincero. No creo que sea algo bueno.
Nunca en mi vida me lesioné y sentí algo que creo que es una lesión”, reveló Schwartzman en declaraciones a la televisación oficial.
“La gente es espectacular, jugar acá me da una mezcla de sensaciones, me encantaría jugar mañana pero no sé qué va a pasar”, agregó el porteño, entre lágrimas de dolor, bronca y emoción.
En caso de estar físicamente disponible, el “Peque” debería jugar este sábado por la tarde las semifinales frente al ganador del duelo entre el brasileño Thiago Monteiro y el portugués Pedro Sousa, que se enfrentaban a continuación.
De esta forma, a la espera de su evolución, dos argentinos se metieron en semifinales del ATP porteño, ya que este viernes por la tarde, el cordobés Juan Ignacio Lóndero superó en el duelo albiceleste al bahiense Guido Pella, segundo preclasificado, en dos sets.
Lóndero se impuso con parciales de 6-4 y 7-6 (4), y ahora se medirá en semifinales al noruego Casper Rudd, quien previamente había dado cuenta del serbio Dusan Lajovic por 7-5 y 6-1, para ratificar su gran momento en el certamen, siendo uno de los tenistas de mayor proyección en el circuito.
El partido entre los argentinos se dirimió por detalles y con variedad de golpes que hicieron un encuentro más que entretenido y en el cual “Topito” Lóndero logró estar más fino en los puntos decisivos.