BUENOS AIRES (NA) — El Gobierno nacional define por estas horas cómo continuar con el distanciamiento social después del 13 de abril, y analiza “cuatro o cinco modelos” en base a los resultados de la cuarentena obligatoria, que si son “positivos” llevarían a “liberar paulatinamente algunos rubros y endurecerse con los grupos de riesgo”.
Así lo anticiparon a NA fuentes oficiales, que consideraron que “si los resultados de la cuarentena son positivos se podría empezar a flexibilizar”, y admitieron que el presidente Alberto Fernández está “confiado, y pareciera que es posible, lograr achatar la curva de infectados”.
“El modelo más obvio es liberar paulatinamente algunos rubros y endurecerse con los grupos de riesgo”, señalaron las mismas fuentes, aunque advirtieron que “no es seguro que se flexibilice” el aislamiento después de Semana Santa.
En ese marco, Fernández “tiene de cuatro a cinco modelos para salir de la cuarentena de una manera ordenada sin poner en riesgo el amesetamiento de la curva (de contagiados)”, para evitar “llegar a septiembre con un nuevo pico”.
“Seguramente será una cuarentena más focalizada, fuertemente focalizada, con otro tipo de medidas. No se piensa como algo parecido a lo que era antes de que se dicte el aislamiento social obligatorio”, señalaron.
En ese marco, detallaron: “Focalizar la cuarentena implica que se le permita a la gente ir a trabajar y volver a sus casas. Algunos rubros definitivamente por dos meses más no van a aparecer: bares, restaurantes, plazas y parques”.
“Creemos que habrá una gran oportunidad, si se mantiene una gran adhesión, de poder profundizar medidas sanitarias para salir bien de esto. Sería insoportable ver las iglesias llenas de ataúdes. Ese es el espejo”, describieron las mismas fuentes, con llegada a la Quinta de Olivos.
“Los pobres, que se les complica cumplir con la cuarentena en 40 metros cuadrados viviendo 8 personas, finalmente van a entender mejor la crisis que estamos viviendo”, evaluaron cerca del Presidente.