NEUQUÉN (ED) — Continua el plan de obras pluviales con el objetivo de controlar las inundaciones habituales en el centro de la ciudad durante los días de lluvia. Asimismo, y a pesar de la compleja situación económica, se sostiene el proyecto de ampliación de la ruta 22, que en el plazo estipulado completará su primera etapa de evaluación de ingeniería.
Según explicó esta mañana en comunicación con La Red el secretario de Coordinación e Infraestructura, Alejandro Nicola, las obras pluviales actuales en Neuquén fueron diseñadas para que el agua se traslade sobre las mismas calles.
En este sentido explicó que el plan de obra es doble, una específica de ejecución de pluviales y, la otra, asociada a la obra de pavimento, que se coordina con la previa instalación de los conductos subterráneos. “A veces hay una rotura de cañería o desborde de cloacas y eso es responsabilidad del EPAS, pero no es lo que pasa todos los días”, aclaró el secretario.
Caños entre 60 centímetros y un metro de diámetro con rejillas sumidero ya fueron instalados en el rectángulo de las calles Roca y Ministro González y San Martín e Independencia, entre Salta y Camino.
“Tenemos dos grandes colectores del agua de lluvia, uno es el arroyo Durán y el otro el arroyo Villa María. El Durán está totalmente a cielo descubierto desde su nacimiento cerca del cruce Balsa Las Perlas y termina desembocando en la Isla 132, unos 200 metros antes de la calle Linares. Y llegando a Tronador desemboca el arroyo Villa María, que está prácticamente todo entubado, no lo vemos”, explicó Nicola.
Asimismo, el encargado de la infraestructura en la ciudad expresó que en tres o cuatro meses tendrán definida la primera etapa del proyecto de ampliación de la ruta 22 a la avenida Vaca Muerta, con avance sobre 20 cuadras con eje en la Avenida Olascoaga. A continuación, deberán evaluar un pliego de licitación, ya que “la situación que ha generado la pandemia impactó económicamente en Neuquén”.
Finalmente, Nicola mencionó que desde la reactivación de la obra privada en la ciudad y hasta el viernes pasado, registraron 453 obras habilitadas, de las cuales 178 son de mediana y gran envergadura. “A los inspectores habituales les hemos agregado diez trabajadores que ayudan particularmente en las obras grandes a realizar el primer control”, concluyó el secretario.
