NEUQUÉN (ED) — Eran las 13:32 de este martes de pandemia (y con nevadas de primavera en localidades de la zona cordillerana), cuando los habitantes de la ciudad de Neuquén sintieron el temblor.
A partir de ahí los testimonios se propagaron a través de las redes para dar cuenta de muebles que se movieron, techos que hicieron ruido como en las jornadas de viento, ventanas que se sacudieron y hasta de personas que experimentaron una desagradable y extraña sensación de mareo.
Luego se supo que el temblor también se había sentido en las viviendas de otras ciudades, entre ellas Cutral Co. También que se trataba de un sismo de magnitud 4.2 con epicentro en la zona de Sauzal Bonito. Primero se había dicho de 4.4, pero el dato fue corregido y se indicó que no había heridos ni daños materiales.
Aquí, en Neuquén se sintió en todos los barrios, especialmente en los edificios más altos de la zona céntrica. “Recibimos llamadas de vecinos que observaron cómo se movían las sillas y las lámparas”, dijo el subsecretario de Defensa Civil y Protección Ciudadana de la provincia de Neuquén, Martín Giusti.
La intensidad del sismo -que se sintió en Centenario y Plottier- fue confirmada por el Instituto Nacional de Prevención Sísmica (Inpres) que dijo que fue de 4.2 y que tuvo una profundidad de apenas siete kilómetros, lo que hizo se sintiera.