NEUQUÉN (ED). — El viento que azota con ráfagas de hasta 84 kilómetros por hora a la ciudad de Neuquén provocó la caída de postes, también de árboles y originó el riesgo de derrumbe de un paredón externo, en la calle Gatica.
El panorama, por cierto complicado, se completa con las nubes de tierra y con el riesgo al que se exponen quienes no tienen más alternativa que transitar por las calles.
La situación es singularmente compleja en aquellas zonas del Oeste en las que las aún hay calles de tierra. Y tiene su correlato en aquellos sectores en los que abunda la cartelería publicitaria, que se ha visto seriamente afectada.
El subsecretario de Medio Ambiente y Protección Ciudadana de la Municipalidad de Neuquén, Francisco Baggio, contó que hasta las 17 se contabilizaban 11 postes de empresas de servicios caídos, 15 árboles caídos (también desprendimientos de pesadas ramas) y, como se dijo, un muro con riesgo de derrumbe en Gatica al 400. Los operarios cercaron el perímetro y se abocaron a la localización del propietario por si es necesario demolerlo.
Baggio indicó que las ráfagas más fuertes fueron de 84 kilómetros por hora y adelantó que la tormenta de viento comenzará a amainar después de las 19. “Es una jornada muy complicada para la ciudad de Neuquén y todos los organismos municipales están trabajando en ello”, explicó.
También la Provincia trabaja en la asistencia, a través de la subsecretaría de Defensa Civil y Protección Ciudadana, que conduce Martín Giusti.
Las fuertes ráfagas comenzaron a sentirse apenas pasadas las 13 y se fueron tornando más intensas, con las consecuentes recomendaciones de los organismo oficiales no sólo para los habitantes de Neuquén sino también para los vecinos de localidades cercanas como Centenario y Plottier.