BUENOS AIRES (NA) — El crucero portamisiles Moskva, buque insignia de la flota rusa del Mar Negro, quedó fuera de servicio y mientras Ucrania dice que lo hundió, Moscú habla de un incendio por causas que se investigan.
La noticia acapara portadas este jueves y los medios occidentales se apresuran a anotar que la pérdida del barco sería una gran derrota militar y simbólica para Rusia en esta guerra que le está costando un precio muy alto.
Rusia dijo que un incendio a bordo del Moskva, un buque de guerra que normalmente tendría 500 marineros a bordo, obligó a toda la tripulación a evacuar el barco.
Más tarde añadió que el fuego había sido contenido y que el barco sería remolcado a puerto con sus lanzadores de misiles guiados intactos, en tanto que se investiga cuál fue el origen del fuego.
El barco lleva 16 misiles, según un analista militar, y su retiro del combate reduciría en gran medida la potencia de fuego de Rusia en el Mar Negro.
Independientemente del alcance del daño, cualquier ataque representaría un gran golpe para el prestigio de Rusia siete semanas después de una guerra que ya se considera un error histórico, según la opinión de la agencia estadounidense Associated Press.
La noticia de los daños en el barco se produjo horas después de que algunos de los aliados de Ucrania buscaran obtener más apoyo para el asediado país.
En una visita con líderes de otros tres países de la UE a las puertas de Rusia que temen estar en la mira de Moscú, el presidente lituano, Gitanas Nauseda, declaró que “la lucha por el futuro de Europa está ocurriendo aquí”.
Las fotos satelitales de Planet Labs PBC muestran al Moskva saliendo del puerto de Sebastopol en la península de Crimea el domingo.
Maksym Marchenko, el gobernador de la región de Odesa, al otro lado del Mar Negro al noroeste de Sebastopol, dijo que los ucranianos atacaron el barco con dos misiles Neptune y causaron “daños graves”.
Oleksiy Arestovych, asesor del presidente de Ucrania, afirmó que el barco se hundió y lo calificó como un evento de “importancia colosal”.
El Ministerio de Defensa de Rusia comunicó que las municiones a bordo detonaron como resultado de un incendio.
El Neptune es un misil antibuque desarrollado recientemente por Ucrania y basado en un diseño soviético anterior.
Los lanzadores están montados en camiones estacionados cerca de la costa y, según el Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales con sede en Washington, los misiles pueden alcanzar objetivos a una distancia de hasta 280 kilómetros (175 millas).
Los Estados Unidos no habían podido confirmar las afirmaciones de Ucrania de que atacó al buque de guerra, expresó el jueves el asesor de seguridad nacional de Estados Unidos, Jake Sullivan.
“No tenemos la capacidad en este momento para verificar eso de forma independiente”, dijo al Club Económico de Washington. Aún así, lo llamó “un gran golpe para Rusia”.