BUENOS AIRES (NA) — Lucas Villarroel es un argentino de Trelew, provincia de Chubut, que hace un mes y medio partió de su tierra con el objetivo de estar estar presente en la Copa del Mundo de Qatar.
Lucas hizo 24 mil kilómetros en una verdadera travesía que incluyó paradas en Lima, Madrid, Barcelona, París, Turquía y finalmente Qatar, país al que arribó el pasado 7 de septiembre.
El chubutense contó que viajó con 1000 euros, pero como el hospedaje “es caro” busca las distintas maneras para ahorrar dinero: carga el teléfono en los shoppings, pide comida en las calles, frecuenta restaurantes para dormir y conectarse a internet, y bebe agua en las fuentes que hay en las plazoletas.
“Quiero aguantar hasta el final para ver si puedo conseguir un ‘ticket’ para la final. Hay que hacer el esfuerzo porque la recompensa va a ser linda”, aseguró en declaraciones a TyC Sports
Además, el joven explicó que peleó con su novia y vendió un vehículo de su abuelo para conseguir la plata para viajar al Mundial, dado que su mayor ambición es ver a Lionel Messi en la gran final de la Copa del Mundo.
“Vine por todo lo que representa Scaloni, la Scaloneta, Leo Messi. Discutí con mi novia. Tenía una camioneta antigua que me había dejado mi abuelo. La vendí, ya no me importaba nada. Arranqué en caliente porque no quería estar más allá”, cerró.