El ministro de Economía y candidato presidencial Sergio Massa graficó hoy con una dura frase el delicado momento que atraviesa la Argentina, al asegurar que a él le tocó llegar al Palacio de Hacienda cuando el “tomuer” estaba frío. Dijo, además, que la devaluación se la impuso el FMI: “Argentina tuvo que tomar una decisión muy desagradable que fue la devaluación de su moneda por imposición del Fondo Monetario Internacional”, indicó.
“A mí me tocó tomar el ‘tomuer’ frío”, señaló Massa, quien también salió al cruce de las críticas que se realizan a la nueva emisión de moneda que debería realizar el Gobierno para otorgar sumas fijas a trabajadores, bono a jubilados y subas de planes sociales, como prometió en las últimas horas. “No me vengan con el verso del plan platita”, dijo el candidato en Crónica TV, sobre la posibilidad de anunciar una suma fija para trabajadores.
Prometió, además, que se “compensará el daño que se ha generado por la devaluación que nos impuso el Fondo, un Fondo que ni trajimos nosotros ni yo renegocié la deuda”. Insistió además en que el acuerdo que persiste con el Fondo Monetario Internacional (FMI) tuvo como consecuencia en los últimos meses una devaluación de la moneda, sin embargo, llamó a la reflexión del electorado a la hora de recordar otra vez que fue el ex mandatario Mauricio Macri quien solicitó el prestado con el organismo internacional.
Massa dijo también que “no puede ser que el aumento del dólar se lo trasladen inmediatamente a la gente”, y como ejemplo puso el acuerdo por la suba de las naftas. “Hoy nos sentamos -después de 11 horas de negociación-, el Estado deja de cobrar impuestos, o sea que cede parte de la ganancia como forma de ayudar y acordamos que de acá al 31 de octubre ya no va a haber más aumentos en el sector”, puntualizó.
Ratificó, además, que “nosotros dejamos el dólar ahí hasta octubre, queda en $350 (siempre hablando del tipo de cambio mayorista oficial)”. Por otra parte, al hacer su análisis sobre el crecimiento del tipo de cambio paralelo, Massa manifestó que “entiende la reacción instintiva” del que va a las cuevas a comprar el dólar blue, pero pidió paciencia y criterio, principalmente a los especuladores. “Hice lo que debía, ayudar a estabilizar”, señaló.