NEUQUÉN (ED). — A falta de un año para las elecciones parlamentarias del 2025 y a más de tres para gobernador e intendente, los actores de la política neuquina comienzan a probarse el traje de candidato, mientras se tejen acuerdos para poder alcanzar los objetivos. La primera contienda electoral llegará en el 2025, con la renovación en el Congreso.
Será clave para el oficialismo que necesita ampliar la cantidad de representantes en ambas cámaras y también para el kirchnerismo que tendrá su primera prueba de fuego tras caer en el 2023. Las legislativas pueden marcar el retorn del peronismo progresista o definir su paso al ostracismo.
En Neuquén, los liberales liderados por la diputada nacional Nadia Márquez, se encuentran en plena conformación de la Libertad Avanza. De candidaturas poco se sabe, pero internamente se baraja que sea la actual legisladora quien encabece la lista de senadores. En cuanto a los candidatos a diputados, todo quedará atado a los acuerdos entre los distintos grupos de liberales. Brenda Buchiniz, Alejandra Durdos o Gabriel Gómez (San Martín de los Andes).
En Unión por la Patria los nombres abundan, pero todo quedará supeditado a solucionar las diferencias internas. Será el congreso del Partido Justicialista el que elija los candidatos, que en las últimas elecciones se distribuyeron entre el sector de Oscar Parrilli y Darío Martínez, que conviven en pos de los intereses. Lorena Parrilli, actual diputada provincial sería impulsada por su padre para el senado y allí existiría el primer “chispazo”, porque los allegados Martínez también hablan de una candidatura del ex secretario de Energía.
La convivencia dentro del peronismo neuquino no será fácil, ya que en la vereda de enfrente al a Parrilli y a Martínez, se ubica el sector que “neuquinizado”: Tanya Bertoldi, Ana Servidio, Marcelo Zúñiga y Soledad Martínez y otros dirigentes que cumplen funciones en el gobierno de Rolando Figueroa.
En el Movimiento Popular Neuquino todo es incertidumbre. Mientras algunos sectores piden a gritos el regreso de Figueroa para que tome las riendas del partido, otros trabajan en el territorio para ir consolidando su nombre y posible candidatura. Osvaldo Llancafilo quiere ser, pero el sector petrolero se opone abiertamente. Omar Gutiérrez apunta a la Cámara Alta, pero muchos dudan. Otro que trabaja recorre el interior neuquino y se muestra activo y crítico en redes sociales, es el ex ministro Ricardo Corradi Diez.
En Juntos por el Cambio, la decisión no es fácil. El sector que es parte de Neuquinizate no se siente cómodo “por tanta idea peronista” dentro del oficialismo. Ese mismo sector acompañó en el balotaje a Javier Milei y saben de la buena sintonía entre el presidente y la conducción del PRO, por lo que quieren ganar terreno en el plano nacional pensando en el 2027. David Schreleth, ex diputado nacional, sería uno de los principales candidatos a encabezar alguna de las listas. Otro que asoma, es el actual secretario de Culto, Francisco Sánchez, quien se siente más cómodo en el ámbito legislativo.
En las filas de Comunidad, el partido del oficialismo provincial, todo es hermetismo. La duda es saber si la persona elegida será alguien de su círculo más cercano o de otro partido que conforman el frente. Una jugada política que además sumando a los aliados, podría darle a Figueroa la mayoría de representación en las cámaras nacionales.
Por último, más relegados llegan Libres del Sur y Unión por los Neuquinos (UNE). El excandidato a presidente, Jesús Escobar (no logró superar el piso de 1.5 por ciento de los votos) lideraría a Libres. En cuanto a UNE, el panorama incierto con Mariano Mansilla como figura relevante. Muchos se preguntan si ambos dirigentes se animarán a poner sus nombres luego del duro golpe del 2023. Aquí UNE saca ventaja por la construcción política que realizó en el municipio de Gaido, donde demostró que si le dan la oportunidad, capacidad sobra.