Diputados de la provincia de Neuquén se anotaron un logro, al que no es sencillo encontrarle precedentes
NEUQUÉN (ED) — Furioso por un proyecto que simplemente propone que aquellos docentes que cumplen con su obligación de dar clases cobren algo así como un plus o adicional, el sindicalismo de ATEN dejó en claro que no está dispuesto a que lo despojen de sus privilegios. Por lo pronto, los diputados que impulsaron esa iniciativa ya lograron algo así como un milagro terrenal: que, en lugar de hacerlo en día de clases, la dirigencia realice un plenario en domingo. La convocatoria es para hoy, en el epílogo del fin de semana extra largo.
El secretario general de ATEN provincia, Marcelo Guagliardo, hizo el llamado a través de sus redes sociales con un comunicado al que tituló “Los Derechos conquistados se defienden”. Dijo que el proyecto “no es otra cosa que un ataque directo a nuestras condiciones de trabajo y un presentismo encubierto”. El plenario de secretarios generales se realizará, este domingo 23 de junio, a las 17.
Los gremialistas intentan presionar sobre los legisladores elegidos por los neuquinos, porque temen perder la herramienta de presión que aplican contra aquellos docentes que no comulgan con sus paros y a los que hasta han expulsado de las escuelas cuando quisieron dar clases. A principio de año, hubo dirigentes que ordenaron a sus activistas ponerles candados a las puertas de las escuelas, para asegurarse de que no haya clases. Los perjudicados fueron, como siempre, los alumnos y estudiantes.
El proyecto lo impulsan los bloques MPN, Hacemos Neuquén, Juntos y JxC – UCR. Para ser precisos, los diputados Claudio Domínguez, Gabriel Álamo, Gerardo Gutiérrez, Patricia Fernández, Guillermo Monzani, Carina Riccomini, Cielubi Obreque, Juan Sepúlveda, César Gass y Alberto Bruno.
Además del premio que, de aprobarse el proyecto, se verá reflejado en los salarios de los docentes cumplidores, es decir aquellos que tienen vocación de servicio y que no toman a los niños de rehenes, los diputados proponen terminar con las suplencias de suplencias, abuso que le genera pérdidas multimillonarias al Tesoro provincial.
El sindicalismo está furioso y ve en esto una nueva ocasión para hacer lo que más le gusta: agraviar y protestar. El propio Guagliardo ofendió al diputado provincial por el PRO, Marcelo Bermúdez que, aunque no estampó su firma en el proyecto, lo elogió y dijo que lo acompañaría. Eso le alcanzó a Guagliardo para tildarlo de “facho” y de “gorila”, en evidente desprecio por la libertad de pensamiento, la diversidad de ideas y el respeto por la opinión de los demás.