BUENOS AIRES (NA) — La selección de Alemania le ganó 2-0 a su par de Dinamarca, en Dortmund, y avanzó este sábado a los cuartos de final de la Eurocopa de la cual es anfitrión. En la próxima fase espera por el ganador del cruce entre España y Georgia.
El equipo local llegaba a este partido tras el agónico empate 1-1 en la tercera y última jornada del Grupo A ante Suiza, un resultado terminó clasificando a octavos de final a los alemanes como primeros y a los suizos como segundos.
Enfrente estaba el conjunto escandinavo que realizó una fase de grupos floja con tres empates que lo clasificaron a la próxima fase como segundo del grupo por el simple hecho de que Eslovenia y Serbia fueron peores que los daneses.
En un Signal Iduna Park repleto de fanáticos alemanes, la lluvia intermitente empezó a azotar la noche de Dortmund alrededor de la media hora de juego y se empezaron a ver los primeros rayos que anunciaban la tormenta eléctrica que se venía en territorio alemán. Acto seguido, el granizo se sumó al panorama y, por ello, el árbitro inglés Michael Oliver tomó la determinación de suspender el partido hasta que deje de llover.
Luego de la reanudación, en el complemento, Alemania abrió el marcador con el gol de Kai Havertz a los 8 minutos. El defensor David Raum desbordó por la izquierda para meter un centro que Joachim Andersen interceptó con la mano y, tras la revisión del VAR, el referí Oliver sancionó penal que el delantero del Arsenal de Inglaterra transformó en el 1-0 con un remate pegado al palo derecho que el arquero Kasper Schmeichel no pudo alcanzar a despejar.
A los 21 minutos, el equipo de Julian Nagelsmann hilvanó una serie de toques desde el fondo hasta que le llegó a Nico Schlotterbeck que metió el pelotazo largo a la espalda de la defensa de Dinamarca donde se encontraba Jamal Musiala que quedó mano a mano ante Schmeichel y definió con tranquilidad al segundo palo poniendo el 2-0 definitivo.
Con este resultado, Alemania clasificó a cuartos de final tras ocho años y enfrentará, el viernes que viene en Stuttgart, al ganador del duelo entre España y Georgia.
Por su parte, Dinamarca no pudo repetir la hazaña de la última edición donde llegó a semifinales y deberá seguir esperando para repetir la histórica conquista en Suecia 1992.