La Justicia neuquina investiga a intermediarios entre las familias carenciadas y la ayuda del Estado. Ya hubo detenciones
NEUQUÉN (ED) — Entre los vicios de la vieja política (esa a la que la mayoría del pueblo rechazó en las urnas) se encontraba el clientelismo con pinceladas de extorsión. El circuito era paragógico. Y más que pernicioso para la sociedad, aunque rendidor para unos pocos. Consistía básicamente en esto: el Estado les daba a los referentes de organizaciones sociales alimentos y recursos monetarios, que estos debían hacer llegar a las familias que lo necesitaban. Pero hubo casos en los que esos recursos quedaron en manos de los intermediarios. Lógicamente no se puede ni se debe generalizar, pero ocurrió en todo el país, incluida la provincia de Neuquén.
Se cree que los líderes de esas organizaciones ordenaban cortes de calles (o rutas) y acampes contra el gobierno que le daba los fondos (verdaderas millonadas) y los destinatarios a los que tenían de rehenes acompañaban porque a ellos no les llegaban los recursos (pero ¡Cómo podrían llegarles si quedaban en manos de los intermediarios!) ¿Para qué los usaban? Se estima o supone que para beneficio personal y para financiamiento de campañas. Era algo así como una presunta matriz de procedimientos, que se había propagado por el país.
Acá, en esta capital de la Patagonia, estaría a punto de destaparse una olla, no olla popular sino olla a presión. De hecho, en el epílogo de la semana hubo 14 allanamientos y 10 detenciones, que a las pocas horas mutaron en liberaciones.
Hasta dónde se sabe, los investigadores -bajo las órdenes del fiscal Pablo Vignaroli- tratan de establecer no sólo el presunto grado de involucramiento de dirigentes sociales, sino también de ex funcionarios del ex gobernador Omar Gutiérrez. Y aquí un paréntesis: Vignaroli ya logró detenciones en otra causa, la del fraude con planes sociales por la que sigue preso el ex director de planes de la gestión anterior, Ricardo Soiza (cierra paréntesis).
Ahora, en esta nueva causa, los investigadores creen que sujetos con cierto grado de representatividad y al parecer escasos componentes de escrúpulos, habrían perpetrado los siguientes delitos.
- Ventas de mercadería que había aportado el Estado provincial para asistir a las familias que lo necesitaban. Los intermediarios se habrían quedado con la ayuda social.
- Cobro de un aporte monetario a los beneficiarios de la ayuda social.
- Extorsión a los beneficiarios de la ayuda social. Despojaban de esa ayuda a los que faltaban a los piquetes.
- Se pudo vincular a dos organizaciones sociales que son Libres del Sur y FOL”, explicaron los fiscales durante una conferencia de prensa.
Una de las detenidas y liberada fue Gladys Aballay, quien fue candidata a diputada nacional por Libres del Sur. Eso enojó y mucho al referente de esa fuerza en Neuquén, Jesús Escobar, quien salió a denunciar presuntas persecuciones.
Si se comprueba que hay culpabilidad deberán responder por ello. Por lo pronto se investiga un tema del que muchos hablaban y contra el que nadie avanzaba.