La vieja política tiene nichos de resistencia. Pero la Justicia avanza en la investigación de maniobras perniciosas de un pasado reciente.
NEUQUÉN (ED). — La lucha contra los vicios de la vieja política sigue adelante y, como era de esperarse, encuentra nichos de resistencia. Nadie dijo que sería sencillo. Pero se sabía que era necesario y la Justicia avanza en ese terreno, inundado de cuestiones de las que antes no se hablaba.
Nótese que la resistencia a la necesidad ciudadana de arrojar luz sobre cuestiones del pasado reciente encuentra unidos a sectores que se al parecer beneficiaron de prácticas que eran aceptadas pero que hoy están cuestionadas. No sólo en la provincia, sino en todo el país, porque así lo pidieron las urnas.
Hace unos pocos días, la Justicia neuquina avanzó contra punteros políticos sospechados de desviar dinero y alimentos que eran destinadas a familias carenciadas a las que, además, obligaban a ir a los piquetes contra el gobierno de Omar Gutiérrez, el mismo que les entregaba los productos a repartir.
Hubo detenciones, entre ellas, la de una ex precandidata a diputada nacional por Libres del Sur, Gladys Aballay. El fiscal Pablo Vignaroli explicó que se investiga a dirigentes de ese partido y de Barrios de Pie y eso hizo que el conductor, Jesús Escobar, pusiera el grito en el cielo.
El ex precandidato a presidente de la Nación (las urnas le dieron la espalda y claudicó en las PASO) contó con el rápido apoyo de los diputados neuquinos del kirchnerismo, como así también con el de los conductores del sindicato docente ATEN.
Escobar salió a pedir renuncias. Hay quienes afirman que no quiere que se investigue si con las maniobras que ahora están bajo la lupa, hubo financiamiento de campañas políticas. Al tiempo que sus aliados del sindicalismo docente están en una “lucha” distinta, pero se juntan en un intento de hacer número frente a los cuestionamientos de la sociedad.
ATEN arrancó este lunes con un paro de 48 horas contra la ley de incentivo que puso en vigencia un plus del 15% en los haberes de los docentes que no tengan más de tres inasistencias justificadas por trimestre. Es un premio que la dirigencia sindical rechaza, porque teme que atente contra su estrategia de la conflictividad.
¿En qué consiste esa estrategia? Cuando se aproxima un calendario electoral, el sindicato capitalino aumenta la conflictividad porque sus dirigentes (Lagunas y Patricia Jure suelen ser candidatas), esto hace que Guagliardo también la incremente para no parecer tibio frente a sus colegas, que buscan destronarlo de la conducción provincial del gremio ¡Y aquí tenemos el otro gran circulo vicioso!, en el que pierden los mismos de siempre: los alumnos y sus familias.
Lagunas y Jure fueron diputadas provinciales y concejales de la ciudad capital, ambas por el Frente de Izquierda; son eternas candidatas y el reclamo callejero les da visibilidad.
Pero los tiempos han cambiado. La sociedad quiere que los recursos del Estado vayan a donde tienen que ir: a la producción, al desarrollo y a la asistencia a quienes lo necesitan, mientras se deja atrás el lastre del pasado. La tarea no es sencilla. De hecho, nadie dijo que sería fácil, pero se impone seguir adelante para darle verdadero valor a la palabra lucha, bastardeada por dirigentes sindicales que acaso la usan en desesperados intentos de defender lo indefendible.
