Tras la destitución de la vicegobernadora, Gloria Ruiz, el gobernador Rolando Figueroa dijo que no habrá perdón para los ilícitos “que realice cualquier ciudadano y, menos aún, uno de los gobernantes”.
NEUQUÉN (ED) – En una semana de alta tensión política por la destitución de la vicegobernadora Gloria Ruiz, el gobernador Rolando Figueroa tuvo la última palabra y fue tajante: “acá, caiga quien caiga, corrupto se va a ir a la casa, sea quien sea”.
Este viernes, en el aniversario de Vista Alegre, el gobernador dio un discurso cargado y, sin mencionar a la destituida Ruiz, apuntó todas las miras hacia el escándalo que ocurrió en la legislatura. También habló del respeto a la división de poderes y de la seriedad de las instituciones que dependen del Ejecutivo.
Figueroa se rodeó de sus ministros y los intendentes de la región, y destacó la “la responsabilidad que han tenido los intendentes de esta provincia al poder firmar el Pacto de Gobernanza número dos, en la ciudad de Chos Malal la semana pasada”.
Aseguró que “hay que administrar los recursos de manera eficiente no se puede gastar más de lo que entra, no se puede gastar en cosas que no son necesarias, no se pueden hacer gastos superfluos y menos aún en esta provincia se va a tolerar un hecho o un acto de corrupción que realice cualquier ciudadano y, menos aún, uno de los gobernantes. Si hay algo que estamos enfocados en la provincia es que llegamos acá para cambiar las cosas”.
Figueroa señaló que “si hay alguien que cometió algún acto que no corresponde con los deberes de un funcionario público inmediatamente se activarán los resortes institucionales”, y agregó que en la provincia “se respetan sus instituciones, se respetan los poderes del Estado. Se respeta la justicia, se respeta el poder legislativo y se respeta al trabajo de distintas instituciones que día a día hacen crecer esta provincia y que dependen del Poder Ejecutivo”.
En ese sentido, también felicitó los trabajadores del Banco Provincia del Neuquén (BPN) y dedicó “otra palabra más de aliento acerca de funcionarios y de empleados que trabajan todo el día, que lo hacen de manera proba, que son los empleados del BPN, que cuando ven un ilícito no lo tapan, en esta gestión lo denuncia, y es la justicia quien tiene que investigar y tiene que utilizar los resortes que sean necesarios para determinar si existió un acto ilegal o no existió un acto ilegal”.