El diputado por el MPN fue obligado a dejar la presidencia de la comisión de Producción en la Legislatura neuquina. Está anclado en el pasado
NEUQUÉN (ED). — La Legislatura neuquina se desperezó, este martes, de la siesta que había dejado la destitución por inhabilidad moral de la ex vicegobernadora Gloria Ruiz (que por estas horas es investigada por la Justicia). Fue por el desplazamiento del diputado (MPN) Gerardo Gutiérrez, quien fue obligado a renunciar a la presidencia de la comisión de Producción, por sus propios compañeros de bloque.
Gerardo venía sumando varios derroteros y desencuentros, que lo mostraban lejos de la gestión del gobernador Rolando Figueroa y distanciado del presidente del bloque del MPN, Gabriel Alamo.
Hubo varias idas y venidas, entre ellas el asunto del otrora Centro de Convenciones “El Cisne”, que en tiempos de la Neuquinidad terminó llamándose Domuyo. Pero hay cuestiones mucho más profundas que tienen que ver con la gestión y con el rumbo político.
El apoyo de los intendentes del MPN a Figueroa, con fuerte acento en la regionalización y los pactos de gobernanza, marcan un rumbo del que Gerardo Gutiérrez ha quedado al margen. Una decisión de dejar atrás los vicios de la vieja política, que el legislador parece no compartir.
Eso en la gestión, mientras que en lo político fue decisivo el proceder de los presidentes de las seccionales, que a principio de febrero, anunciaron su apoyo a los candidatos que lleve (a las legislativas) el frente de partidos que conduce Figueroa. Firmaron todas menos una: la de Centenario que comparte su línea de pensamiento con Gutiérrez, quien por ahora sigue en el bloque, aunque -en su postura- parece más cercano a la máquina de impedir que quiere encender el Kirchnerismo, pero que no puede debido a que su bloque apenas tiene tres bancas. Gerardo Gutiérrez siempre apoyó cuestiones K, como el mal llamado idioma inclusivo y otras que huelen a pasado.
Además ha sido salpicado por el incómodo asunto de las canchas de fútbol de césped sintético cuya construcción (algunas se pagaron pero no se construyeron) son motivo de una investigación judicial.
