Las enseñanzas de Belgrano y la realidad de Neuquén




“Hubo un tiempo de desgracia para la humanidad en que se creía que debía mantenerse al Pueblo en la ignorancia, y por consiguiente en la pobreza, para conservarlo en el mayor grado de sujeción”. La frase pertenece a Manuel Belgrano, a quien se recordó este jueves en todo el país, con motivo de la conmemoración el Día de la Bandera. No obstante, la Bandera no fue su único legado, sino que dejó una profunda enseñanza, cuyos primeros ensayos trazó bastante antes de la Revolución de Mayo.

El historiador Felipe Pigna destacó que, en 1798, como secretario del Consulado, redactó lo que podemos considerar el primer proyecto de enseñanza estatal, gratuita y obligatoria presentado en lo que hoy es la Argentina.

Belgrano nunca dejó de enfatizar la importancia de la educación, a la que consideraba la base para mejorar las costumbres y “ahuyentar los vicios”, escribió Pinga. Y citó al prócer: “¿Cómo se quiere que los hombres tengan amor al trabajo, que las costumbres sean arregladas, que haya copia de ciudadanos honrados, que las virtudes ahuyenten los vicios, y que el Gobierno reciba el fruto de sus cuidados, si no hay enseñanza, y si la ignorancia va pasando de generación en generación con mayores y más grandes aumentos?”

Las enseñanzas de Belgrano fueron rescatadas, este jueves, por el ministro Jefe de Gabinete de la provincia de Neuquén, Juan Luis Ousset, quien en su discurso también destacó los alcances del programa de becas que puso en marcha el gobernador Rolando Figueroa, para asegurar que todos los neuquinos (desde el nivel Inicial al terciario) tengan acceso a la educación en cada pueblo de la provincia.

“Dentro de las prioridades, la número uno es la educación, por eso apenas comenzó la gestión se lanzó el programa más importante de la historia de la provincia de Neuquén en materia de becas educativas, que se hace a partir del aporte de las empresas hidrocarburíferas. En definitiva, les pedimos a quienes extraen nuestros recursos que colaboren para educar a nuestra gente”, dijo el ministro. 

Y subrayó que “todos los chicos que necesiten una beca van a poder acceder a ella, porque invertir en educación, al igual que lo visualizó Manuel Belgrano, sigue siendo el eje y la base para el progreso de una sociedad”. Ousset hizo estas declaraciones en el Gigante del Este, gimnasio de la ciudad capital, durante un acto que organizó el municipio.

Con obras, con mejoras en las condiciones de trabajo, con mejores salarios y con políticas destinadas a la terminalidad de los estudios y al arraigo, esta gestión ha dado muestras de preocupación y acción por fortalecer al sistema educativo que, en definitiva, es el pilar sobre el que se edifica el futuro. 

Prueba de ello, el edificio propio para la escuela secundaria de Los Miches, pequeña localidad del Norte, cuyos adolescentes ya no tienen que emigrar a otras urbes para formarse. Hoy estudiar en la provincia de Neuquén es más fácil. Y eso es tan bueno como irrefutable.

No obstante, hay cuestiones por resolver y vicios por erradicar. El abuso de las suplencias (hay suplencias de suplencias, en lo que representa una locura), las marchas al mediodía para afectar ambos turnos y los paros sin razón de ser se empeñan en persistir, de la mano de una dirigencia gremial que no se aviene a comprender que la prioridad deben ser siempre los niños, y fueron precisamente los niños los que inspiraron los pensamientos del prócer.

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