Los números que entusiasman a Milei y Caputo. El Gobierno nacional destaca los anuncios de empresas de primera línea que permitirán aumentar la producción.
BUENOS AIRES (NA) — El Gobierno estima que la concreción de los primeros proyectos del Régimen de Incentivo para Grandes Inversiones (RIGI) inyectará US$ 47.100 millones en la economía del país.
¿Empezó la lluvia de inversiones? Al menos esa es la ofensiva lanzada por el oficialismo para mejorar las expectativas económicas de los agentes financieros y lograr torcer el rumbo de la severa recesión que sufren varios sectores de la industria y el comercio, y capitalizar el inédito nivel de respaldo en la opinión pública que mantiene el presidente Javier Milei, que aún ronda el 50%.
Valentín Nabel, director de la consultora Opinaia, confirmó que el jefe de Estado sostiene su nivel de imagen positiva y la sensación en mucha gente de que “esta vez el esfuerzo valdrá la pena”, a pesar de la compleja situación que atraviesa más de la mitad de la población sumida en la pobreza.
El ministro de Economía, Luis Caputo, dijo que “los dólares van a sobrar”, en momentos que el Banco Central pugna por hacerse de divisas al intervenir en el mercado, luego de una sangría que lo afectó en junio, julio y parte de agosto, en medio de las fuertes intervenciones para mantener a raya los dólares financieros, el pago de importaciones y los vencimientos de deuda.
Ahora que los dólares están en franca baja, parece haber llegado el momento de intentar acumular divisas, y aprovechar los ingresos puntuales de dólares que se esperan para las próximas semanas.
En agosto ya se empezó a notar el ingreso de divisas en la recaudación, con US$ 130 millones correspondientes al blanqueo de capitales. Todavía queda casi un mes para que venza la primera etapa, que sería la más fuerte en entrada de dólares, según los cálculos de Economía.
Corresponderá a quienes declaren efectivo que deberá quedar en cuentas especiales o ser invertido, para evitar la multa del 5%.
Por ahora, la mayoría de quienes entraron a la regularización de capitales apuntan a un mix, ya que depositan una parte y declaran inmuebles pagando la multa.
De acuerdo con especialistas contables, quienes tienen grandes volúmenes de capital por ahora piensan en pagar la multa, pero no repatriar. En cambio, los ahorristas más chicos, están apostando a la opción de depositar los fondos en las cuentas especiales del blanqueo, y piensan en alguna de las muchas opciones de inversiones para evitar la multa.
Es que hasta el 30 de septiembre no pagarán el impuesto del 5% quienes ingresen menos de u$s100.000, o superen ese monto, pero lo depositen o invierten en activos financieros o inmobiliarios hasta el 1 de enero de 2026. Luego de esa fecha, ya no se podrá ingresar efectivo, mientras que el resto de los bienes (incluidas las cuentas bancarias) pagarán desde octubre una alícuota 10% hasta el 31 de diciembre y un 15% hasta el 31 de marzo de 2025.
Un dato clave que entusiasma al Gobierno es que los depósitos en dólares subieron en casi u$s900 millones desde que se anunció el blanqueo, mientras se espera la entrada de un tramo fuerte de fondo a lo largo de septiembre.
En la tónica de que sobrarán los dólares, el Gobierno recibió esta semana buenas noticias de anuncios de inversiones: la petrolera Vista destinará u$s1.000 millones a aumentar la producción en Vaca Muerta; Stellantis (Fiat) pondrá US$ 350 millones para incrementar la producción en su planta cordobesa; y Mercado Libre destinará US$ 75 millones a su segundo centro logístico en terrenos del Mercado Central.
A esto se suma la promesa del Banco de Interamericano de Desarrollo de aportar u$s100 millones para obras de infraestructura, y los u$s 5.000 millones que habrían puesto sobre la mesa un grupo de entidades -incluido el banco Santander-, para prestarle a la Argentina en el momento que lo necesite.
La decisión de enviar al exterior unos u$s 5.000 millones en reservas de oro por parte del Banco Central respondería además a la estrategia de Caputo de interesar a fondos soberanos de Arabia Saudita a prestarle plata a la Argentina.
A esto se suman los anuncios de inversión que vienen haciendo empresas mineras internacionales para destinarlos de desarrollos en Jujuy, Salta y San Juan, entre otras provincias, para extraer litio, cobre y oro.
El Gobierno se guarda además bajo la manga la posibilidad de aplicar una baja de retenciones a las exportaciones de soja, para incentivar a que los productores vendan mercadería por unos u$s8.000 millones, que permitirían engrosar las arcas del Banco Central.
Las inversiones que espera Javier Milei, tras anunciar el RIGI
En este escenario, la empresa Aluar anunció que invertirá unos u$s700 millones para agrandar su planta de aluminio en Chubut.
En tanto, Neuquén concentra el 76% del total de las inversiones de upstream para este año con US$ 8.630 millones y busca aprovechar el impulso de Vaca Muerta.
A su vez, Santa Fe acaba de organizar un mega foro de negocio con casi mil empresas nacionales y extranjeras y apunta a convertirse en destino de inversiones, especialmente en Rosario, donde empiezan a reducirse los hechos de violencia.
El potencial de inversiones en Salta, Jujuy y Catamarca trepa a 19.000 millones de dólares e implica la generación de 15.000 puestos de trabajo, según cálculos oficiales, impulsados por el RIGI.
Además, Milei espera capitalizar su visita a Silicon Valley, donde se entrevistó con los dueños de Apple, Meta, Alphabet y Open AI. En la Casa Rosada estiman que del sector de tecnología podrían llegar inversiones por unos u$s 1.000 millones.
El Gobierno espera además capitalizar parte de la gigantesca inversión por unos US$ 45.000 millones que la Unión Europea destinará a América Latina para avanzar en energía sustentable, como el hidrógeno verde.
Y se aguarda que a partir de enero el proyecto de YPF y Petronas para construir una planta de licuefacción al sudeste de Río Negro comience a desembolsar divisas.
Pampa Energía, además, acaba de anunciar una inversión por u$s 500 millones en la construcción de una nuevo parque eólico en Bahía Blanca.
Según un estudio difundido en el encuentro del IAEF en Mendoza, las empresas argentinas prevén para 2025 un aumento significativo en las inversiones con miras a una potencial mayor rentabilidad.
Los sectores energético y agrícola presentan el mayor potencial de crecimiento, impulsando tanto el desarrollo económico como las exportaciones. Las empresas ven con agrado, por ejemplo, la caída en la inflación, que las consultoras que reportan sus proyecciones al Banco Central estiman en 3,5% para septiembre.
La simplificación tributaria y administrativa, junto con un acuerdo entre Gobierno, sindicatos y empresas, emergen como las principales acciones estatales que mejorarían la competitividad empresarial y facilitarían los planes de inversión, según los ejecutivos encuestados.
El sector empresarial también pide un plan económico claro y sostenible (24%), política cambiaria estable (23%) y una reforma tributaria que estimule la inversión (20%).
En ese sentido, se aguarda con expectativa la presentación del Presupuesto 2025, que el presidente Milei decidió hacer personalmente en el Congreso. Incluiría fuertes críticas a la oposición y podría disparar nuevas polémicas entre el jefe de Estado y Cristina Kirchner.