
Unos insisten en la inocencia de un sujeto que fue detenido cerca de los focos ígneos. Otros deslizan sospechas sin sustento alguno.
NEUQUÉN (ED). — El incendio de bosques en la Patagonia motivó lamentos, trabajos heroicos, respuestas sin precedentes, grandes esfuerzos y también comentarios de quienes no hicieron ni hacen absolutamente nada para combatir las llamas. Entre ellos, los referentes de la izquierda y del kirchnerismo neuquino.
La diputada Gabriela Suppicich (FIT-U) -que ahora ha dejado su banca en ese singular sistema de rotación que tiene la izquierda- y el diputado Andrés Blanco (PTS-FIT-U) presentaron un proyecto en repudio a lo que consideran “la persecución contra el ciudadano neuquino Nicolás Heredia”.
Lo describieron como un “brigadista voluntario en el Bolsón, que fue apresado sin pruebas mientras se investiga si tiene alguna responsabilidad en provocar focos de incendio en la zona cordillerana”. Solicitaron su liberación. “El joven es de Senillosa y se encontraba haciendo turismo”, dijeron los diputados de izquierda. Pero lo cierto es que la Justicia dice tener suficientes elementos de prueba como para sospechar que tiene responsabilidad en el siniestro. De hecho, es por eso que lo mantiene tras las rejas.
El proyecto de la izquierda fue acompañado por las diputadas Patricia Fernández (MPN, ex intendente de Senillosa) y por Lorena Parrilli (Unión por la Patria). Al mismo tiempo, sus compañeros del bloque kirchnerista, Darío Peralta y Darío Martínez (Unión por la Patria), presentaron un proyecto para prohibir el cambio de uso del suelo en áreas afectadas por incendios forestales, por un período de 60 años.
El planteo de estos dos es, en realidad, el siguiente: “Los incendios forestales constituyen una de las principales amenazas para nuestro patrimonio natural, siendo especialmente preocupante la utilización del fuego como método para modificar el uso del suelo, particularmente para habilitar tierras con fines inmobiliarios o productivos”. Es decir, insinúan sospechas tratan de embarrar la cancha, pero no presentan elementos para sostener sus dichos.