NEUQUÉN (ED). — El concejal Marcelo Bermúdez defendió el proyecto con el que propuso la implementación de la llamada ficha limpia, en el ámbito de la ciudad de Neuquén.
Básicamente propone que aquellos que hayan sido condenados en primera instancia por delitos de corrupción, violencia de género y otros, no puedan ser funcionarios ni candidatos. Considera que no hay que esperar a las instancias de apelaciones ni mucho menos a la condena firme, para excluir a esas personas.
“Tenemos que elevar la calidad de la política”, dijo Bermúdez y, en diálogo con la AM550, preguntó “¿Cómo se eleva esa calidad?” “Se eleva -dijo- con el ejercicio de la política, pero también con la selección de los aspirantes”.
La iniciativa del edil del PRO va en sintonía con un proyecto que Juntos por el Cambio presentó en la Legislatura provincial. “Hoy cualquier trabajador que aspira a conseguir un trabajo tiene que fundamentar sus antecedentes, y un político lo tiene que hacer aún más, porque va a manejar la cosa de todos”, explicó.
Consideró que los aspirantes a ocupar cargos públicos, “no tienen que tener determinados antecedentes, por ejemplo una primera condena por delito de corrupción”. Respecto de las instancias judiciales que le siguen a la primera condena, el concejal dijo que en ese caso, “ya hubo un juez que le asignó una responsabilidad”.
Sostuvo que lo mismo debería ocurrir en los casos de violencia de género o delitos de adulteración de documentos. “Imagine a una persona que aspira a ser cajera en un supermercado y tiene una primer condena ¿Le darían el empleo? Bueno, entonces por qué vamos a aceptar un legislador o un gobernante en esas condiciones”, concluyó.