PLOTTIER (ED) — Regresó anoche el camión solidario de Plottier que llevó alimentos, ropa, colchones e insumos de higiene que donó la ciudad a los damnificados por los incendios de la comarca andina.
Tras su regreso por la zona afectada por los incendios, el subsecretario de Integración Social y Urbana y responsable de Defensa Civil, Pablo Ruiz se mostró consternado por la situación que encontraron y afirmó que fue “un viaje agotador, muy llenador por poder ayudar a esta gente” pero advirtió que “todavía queda mucho por hacer”.
Si bien inicialmente se programó la entrega de los elementos en el municipio, allí la descarga se realizó en la delegación de bomberos de El Hoyo. Fueron entregadas camas, colchones, frazadas, ropa, comida, agua, un freezer, una heladera y calzado.
En diálogo con El Digital Plottier, Ruiz señaló que al llegar “nos encontramos con una situación totalmente distinta a la que vive Neuquén. Neuquén tiene un sistema de defensa civil muy activo, de trabajo totalmente distinto. Me quedé sorprendido con la precariedad que están asistiendo a la gente”, indicó y resaltó los problemas en la organización.
Recordó que “la gente se quedó sin nada, y tiene que bajar de los cerros a los lugares de acopio, a buscar las cosas que se donan de otros lugares. Así y todo la gente se las rebusca, no quieren abandonar lo poco o nada que le quedó”, lamentó.
Indicó que los bomberos están cansados, la brigadas de otras provincias llegaron muy tarde, y permanecen focos que todavía están apagando, aunque no corren riesgo las viviendas.
A modo de reflexión, el funcionario señaló que “me vine feliz por haber podido entregar las cosas y ayudar, pero con un trago amargo, de no poder seguir ayudando, de no poder organizar esa gente. Hay mucha desolación, es preocupante la situación allá, con gente que llega a pedir agua y colchones”.
Graficó que “no pudimos quedarnos porque no hay lugar, no hay señal, no hay luz y no hay agua potable en el Hoyo. Por eso las donaciones se tienen que focalizar en el agua, en los alimentos, en los materiales para la construcción, elementos de curación e higiene necesitan de todo. Ya no necesitan más ropa, hay mucha ropa que ya no saben dónde guardarla”, enfatizó.
Las donaciones se trasladaron en un camión que puso a disposición un vecino de Plottier y el municipio ayudo con el combustible. Varios voluntarios municipales acompañaron el viaje.
Finalmente, Ruiz destacó la ayuda de todos los vecinos de Plottier que se sumaron a la enorme tarea solidaria, y sin los cuales no habría podido realizarse la asistencia.