NEUQUÉN (ED). — Los incendios en el sur del país no dan tregua y a la tragedia ambiental se sumó otra. Un helicóptero Bell 412, que combatía las llamas cayó en Quillén, en la localidad de Aluminé. Se trata del piloto y el mecánico, los dos únicos ocupantes de la aeronave, que había sido contratada por la provincia a una firma de Buenos Aires. Se investigan las causas de la caída.
El secretario de Desarrollo Territorial y Ambiente, Jorge Lara, informó que el helicóptero cayó en un lugar de difícil acceso y que, según explicó personal de Fuerza Aérea que intentó llegar hasta la aeronave, la misma se prendió fuego.
“Como hay muchas ráfagas de viento que levantan todo lo quemado, las cenizas y la tierra, es muy difícil verlo”, indicó.
En diálogo con la prensa local, se indicó que hasta las 15 no se había podio acceder al lugar del incidente.
Ayer el Consejo Federal de Medio Ambiente y el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible, declararon este martes la “emergencia ígnea en todo el territorio nacional” por un año ante la gran cantidad de hectáreas quemadas. En estos momentos hay alrededor de 300 brigadistas y 17 medios aéreos que trabajan para controlar los incendios en la Patagonia, en zonas del Parque Nacional Nahuel Huapi, la Comarca Andina y Aluminé.
Según el pronóstico hoy sería el último día de intenso calor y recién mañana habría una baja de inestabilidad permitiendo que en los siguientes días haya lluvias en las zonas afectadas por los incendios. Las llamas ya vienen consumiendo varias hectáreas hace 22 días y muchos vecinos tuvieron que evacuarse.
