BUENOS AIRES (NA) — Los vuelos en aeronaves oficiales que suelen llevan a la vicepresidenta, Cristina Kirchner, desde la Ciudad de Buenos Aires hasta El Calafate representan un exorbitante gasto para el Gobierno si se lo compara con el valor de un pasaje para el mismo trayecto en Primera Clase de Aerolíneas Argentinas, ya que hay una diferencia de 1.800%.
El dato surge en base a la información a la que accedió en NA a través de un pedido de acceso a la información pública para conocer la cantidad de viajes que realizaron las aeronaves de la Flota Presidencial desde el Aeroparque Metropolitano “Jorge Newbery” hasta el Aeropuerto Internacional de El Calafate “Comandante Armando Tola”.
Desde el comienzo de la gestión del Frente de Todos en la Casa Rosada, la titular del Senado utilizó distintas aeronaves oficiales para hacer el vuelo directo entre la Capital Federal y la ciudad santacruceña: el Tango 04, un Boeing 737-500; el Tango 10 y el Tango 11, ambos Learjet 60.
En algunas ocasiones, los aviones realizaron vuelos ferry, es decir que iban vacíos, con el sólo objetivo de ir a buscarla a El Calafate.
Además, la vicepresidenta también hizo varias veces el viaje hacia Río Gallegos en aeronaves oficiales, como una suerte de escala, así como también supo volar a bordo de aviones de la empresa YPF, que se amparó en su condición de Sociedad Anónima para no revelar esa información ante una consulta de Noticias Argentinas.
A continuación el detalle de los vuelos realizados por aeronaves de la Flota Presidencial desde la Ciudad de Buenos Aires hacia El Calafate y el costo de combustible:
Si se suma el costo de esos vuelos, el número asciende a la 5.993.956,67 pesos.
Actualmente, un pasaje para cubrir ese trayecto en Primera Clase de Aerolíneas Argentinas ronda los 30 mil pesos. Si se compara esa cifra con los 554.413 pesos que costó el último vuelo, llevar a Cristina Kirchner a El Calafate costó un 1.800% más que lo que hubiera salido pagarle un asiento en la línea aérea de bandera.
En momentos en que la palabra “ajuste” vuelve a rondar la realidad de los argentinos, algunos sectores apuntan a este tipo de privilegios para recortar en primera instancia.