“La República Argentina tiene 257 diputados que supuestamente, representan a los ciudadanos de todas las provincias. El Congreso tiene la obligación de tratar, discutir, aprobar, modificar todas las leyes que rigen en este país, dándoles media sanción para luego ser ratificadas, o no, por los senadores que representan a las provincias.
La gran incógnita es si estos seudo representantes nuestros, piensan y actúan sobre las necesidades del pueblo para legislar. Evidentemente no.
Hace unas semanas atrás, el 60 por ciento de los argentinos se ilusionó con la iniciativa de suspender por 180 días la ley de alquileres que rige en Argentina. Se tiraron algunas bombas de humo durante unos días, y luego se extinguieron. Pero no se apagaron las consecuencias de la ley.
El gobierno dio a entender, que por el momento todo va a seguir igual, para calmar al sector de propietarios que fue retirando del mercado las viviendas disponibles..Y digo yo, ¿quién piensa en el que alquila?.
También se supo, que quienes deban renovar el alquiler anual en mayo, pagarán el 96 por ciento mas. Es decir el que hoy paga 70 mil, pasará de un soplo a pagar 137 mil, mientras sigue ganando, quizás 150.
En junio ya se habla que el incremento será del 102 por ciento.
Esto que significa que miles de argentinos deberán revisar sus cuentas, y seguramente buscar un lugar más pequeño o más alejado para vivir, perdiendo calidad de vida. Claro, siempre y cuando pueda reunir entre 300 y 500 mil pesos para pagar el ingreso a una nueva vivienda. Y muchos otros argentinos, directamente se verán obligados a vivir debajo de un puente.
A quienes les pagamos muy bien todos los meses, ¿les interesa el argentino que está al lado, al que obligatoriamente deben representar , y que ya no sabe qué hacer para vivir?.
La indiferencia de los que gobiernan, oficialismo y oposición, por los verdaderos problemas de fondo que enfrentamos los argentinos, es indignante. Mientras tanto cada vez hay más familias en las calles, o al borde de la desesperación por no poder resolver un tema vital como tener un lugar donde vivir.
Nadie les reclama sus incumplimientos de los deberes de funcionarios públicos. Nadie se hace cargo de nada. A esta altura sólo deben agradecer la adultez del pueblo argentino que no los hecha a patadas de los sillones que ocupan con tanta liviandad.
Por eso reitero. No sólo estoy triste por el país al que nos llevaron, también estoy furiosa”.
