BUENOS AIRES (NA) — Lejos de la imagen dejada en el Santiago Bernabéu cuando ganó la Copa Libertadores, River tuvo otra noche para el olvido y perdió como local ante Unión de Santa Fe por 2 a 1, en el postergado de la duodécima fecha de la Superliga.
El “tatengue” se impuso con los goles de Franco Fragapane, a los 36 minutos del primer tiempo, de penal, y Diego Zabala, a los 27 del complemento, mientras que el descuento “millonario” llegó por un gol en contra de Jonathan Bottinelli, a los 44.
Con esta derrota River acumula seis partidos seguidos sin victorias, y se esfuman casi por completo sus chances de pelear el título y solo podrá pensar en la clasificación a alguna copa internacional.
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El partido se hizo ordinario por momentos, por las imprecisiones de los dos equipos, a los que se les nota la falta de fútbol.
No obstante River mostró algo más de inquietud para poder abrir el marcador, y Marcelo Gallardo dispuso que el colombiano Juan Fernando Quintero sea el hombre que maneje el fútbol del equipo, con “Nacho” Fernández por el costado izquierdo.
Sin embargo, la fórmula al “muñeco” no le dio los resultados esperados, aunque a los 8 Quintero remató desde afuera y se fue por encima del travesaño.
Unión fue prolijo y efectivo. Se aferró a lo que quería y encontró su premio a los 36 con un penal que el juvenil Sibille le cometió a Troyansky que Fragapane transformó en gol.
En el complemento Unión hizo bien su libreto, porque juntó sus líneas en defensa y siempre trató de estar cerca de la pelota, no tanto para marcar el pase que podía dar Juan Fernando Quintero, sino también a los posibles receptores.
Casi inconexo en la manera de poder elaborar jugadas, River deambuló entre la incertidumbre de lo que podía ofrecer y las ganas que tenía para poder romper el cerco de Unión.
La manera en que tenía de atacar River fue repetitiva y sin sorpresa, porque abusó de los centros aéreos y facilitó la tarea de Gómez Andrade para despejar cada balón que surcó sus aires.
De esa manera River nunca pudo poner ni a Pratto, ni a Santos Borré de cara a Nereo Fernández y por ese motivo Unión tuvo siempre alguna chance a mano.
En una jugada casi inesperada, Martínez desbordó por la izquierda, envió un centro al medio y Zabala sentenció a un Armani que no había tocado la pelota en todo el complemento.
Casi como si fuera un designio de la noche, un remate lejano de Quintero fue despejado por Bottinelli y el balón se metió junto al palo de Nereo Fernández, que quedó descolocado, y fue el casual descuento de River.
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