(ED/NA) — El presidente de la Cooperativa Calf, Carlos Ciapponi, criticó hoy los nuevos incrementos en el costo de energía anunciados por el Gobierno y la decisión de eliminar subsidios al sector distribución de electricidad, al tiempo que adelantó que no abonará a CAMMESA el aumento mayorista porque “no se está en condiciones de trasladar ese ajuste al usuario final”.
Ayer se oficializó el compromiso del gobierno neuquino de absorber los subsidios a la tarifa social, que Nación eliminó desde los primeros días de enero. La situación había encendido las alarmas en más de 16 mil usuarios. En esta línea, Cipapponi aseguró que no descarta una “rebelión” por parte de las cooperativas en contra de la quita de la “tarifa social” al sector de distribución de electricidad.
Aseguró que planteará el tema el miércoles en la próxima reunión de la Federación de Cooperativas Eléctricas de la Argentina, que agrupa a más de 240 distribuidoras y brinda servicio a más de 4 millones de hogares.
Explicó que “son muchos los usuarios que registran consumos de más de 500/600 kilovatios, que hoy ya pagan entre 8.000 y 10.000 pesos por mes, y con un aumento adicional de 55% que impulsó el Gobierno, se va a hacer realmente complicado de afrontar”, remarcó.
En cuanto a la realidad del sector, detalló que el costo de la energía históricamente representó poco más de 30% en el presupuesto de la cooperativa, y ahora está cerca del 70%; más los impuestos y tributos que se aplican en las facturas.
Calf se expidió en desacuerdo con esta fase de la política aplicada en material energética por el Gobierno y ya lo hizo saber a través de una presentación judicial para que se reduzca la carga tributaria.
“El servicio eléctrico es considerado un servicio esencial, y Hacienda debe fijar una alícuota de IVA diferencial. Por ejemplo, el pan y la leche pagan 10,5% de IVA. Sin embargo, el usuario de electricidad paga un 21%, y un comercio o una pyme paga el 27%. En los últimos tres años, se pagó un aumento por encima de cualquier recomposición salarial, y debió aplicarse el IVA como servicio esencial, y no que los comercios y las pymes tengan que pagar hasta un 27%”, resaltó.