BUENOS AIRES (NA) — River Plate salvó anoche el invicto del certamen tras empatarle sobre la hora como local 2 a 2 a Internacional de Porto Alegre, al cabo de un entretenido encuentro disputado en el estadio “Monumental”, por la sexta y última fecha del Grupo A de la Copa Libertadores de América.
Julián Álvarez, a los 34 minutos de la primera etapa, inauguró el marcador para el conjunto de Marcelo Gallardo, mientras que Rafael Sóbis, a los 44, niveló las acciones para el cuadro de Porto Alegre.
Ya en el complemento el mismo Sóbis, esta vez por medio de un penal, a los 13 minutos, colocó en ventaja a la visita, pero Lucas Pratto, a los 48, puso el empate definitivo para el dueño de casa.
Ya clasificado a la siguiente ronda y sin poder arrebatarle el primer puesto a su rival, el objetivo del local se centraba en convertirse en unos de los mejores segundos, aunque dicho propósito pareció no encontrar eco en algunos habituales suplentes.
Un Inter que jugó como si necesitara imperiosamente las tres unidades se encargó de complicarle el desarrollo hasta límites insospechados a su oponente desde el mismo inicio del cotejo.
Pese a ello el dueño de casa encontró la apertura tras una cesión de Palacios (tras lujoso sombrero) que recaló en los pies del juvenil Álvarez (pareció en la misma línea que el último defensor) para la posterior definición de éste ante el arquero Marcelo Lomba.
Luego de esa conquista se vio el mejor fútbol del elenco de Gallardo pero un remate descontextualizado del experimentado Sóbis que tomó un raro efecto y que no encontró la mejor respuesta en el hoy vacilante Armani, le permitió a la formación brasileña retirarse al entretiempo con una igualdad que comenzó a justificar apenas iniciado el segundo período.
Con una pareja de centrales locales muy por debajo del nivel de los habituales titulares y mostrando algunos rendimientos individuales por demás discretos, River se fue consumiendo en su impotencia ante un rival con mucho oficio que tuvo como banderas al gravitante Sóbis y al juvenil Nonato.
Producto de su mejor andar, Inter dio vuelta el match mediante un discutible penal cobrado por el chileno Piero Maza luego de un forcejeo mutuo entre Luciano Lollo y Rodrigo Moledo.
La excelente ejecución de Sóbis a la derecha de Armani -fue al mismo palo pero no llegó- afianzó el buen andar del conjunto de Odair Hellmann, en desmedro de un “Millonario” que debió buscar soluciones urgentes en el banco de suplentes.
Con tres minutos de descuento y cuando nada permitía intuir una reacción del anfitrión, una pelota que se elevó inesperadamente tras un centro de Álvarez terminó por rebotar en un defensor de Internacional para descolocar en demasía al arquero de la visita, quien pese a ser víctima de cierta fatalidad no pareció elegir la mejor opción al no rechazar el envío por arriba del travesaño.
Tras ceder un innecesario rebote, el voraz Pratto se encargó de premiarse a sí mismo tras su buena labor personal con un remate desde corta distancia que terminó por decretar la igualdad definitiva que deja como conclusión que la rotación le dio resultados relativos al “Muñeco”, ante un adversario que no por fruto de la casualidad ganó holgadamente la zona.