“En la provincia se aplican políticas flexibles con la contaminación, hay controles escasos y una proporción desequilibrada entre el daño ambiental causado, las multas y la facturación del negocio de la industria”, dijo el vicegobernador Rolando Figueroa, tras el derrame de Bandurria Sur.
Cuestionó que “este Gobierno no defiende el medio ambiente en Vaca Muerta, solo defiende a las empresas; ya que para alcanzar ese objetivo se necesitan funcionarios valientes que actúen con el respaldo de políticas claras, algo que no se ve en las autoridades del Ejecutivo provincial ni en el Gobierno Nacional”.
El vicegobernador pidió elevar el rango del área de Medio Ambiente y señaló que “a los recursos de Vaca Muerta hay que cuidarlos desde lo económico para que generen un desarrollo armónico y con equidad; pero también debemos defender con firmeza una extracción limpia para preservar el medio ambiente”, dijo.
“Para el Gobierno Nacional y provincial, el cuidado del medio ambiente en Vaca Muerta es un aspecto que queda relegado a los negocios y a las inversiones; pero nosotros pensamos que es tan importante traer dólares para seguir desarrollando Vaca Muerta como evitar las agresiones a la flora y fauna en nuestro territorio”, agregó Figueroa.
Para tener más vigilancia ambiental, continuó, “hace falta un Estado fuerte y presente que castigue con auténtico rigor cuando se producen episodios de contaminación como el ocurrido en Bandurria Sur por un pozo que estuvo descontrolado durante un día y medio”.
“Especialistas de la Universidad Nacional del Comahue ya dijeron que este episodio de contaminación dejará secuelas ambientales en el área afectada por el derrame. Y cuando defendemos a la universidad pública es también por estas razones, porque es una institución que puede darle a la sociedad una mirada con autoridad y sin la presión de los lobbies”, finalizó Figueroa.
